La ubicación costera de Huelva y sus características físicas posibilitaron el establecimiento y desarrollo de importantes culturas de origen autóctono y extranjero. En la Edad Antigua, el mar sirvió como salida de los recursos de la mina a través de Huelva lo que supuso un atractivo para la instalación en sus tierras de las siguientes civilizaciones: fenicios, griegos, Tartessos, púnicos y romanos. En la Edades Media y Moderna, la ciudad cede su florecimiento a la vecina de Saltés, ocupando nuevamente un espacio privilegiado de salida al mar. Con el auge de los conocimientos marinos encabezados por los marineros de la provincia en la Modernidad, la capital se erige, por sus lazos con el mar, en protagonista de la gesta del descubrimiento de América en 1492. La Edad Contemporánea viene marcada por la venta de las Minas de Riotinto a los ingleses, lo que supone un nuevo modo de colonización económica y cultural en la época victoriana. La actual configuración de la ciudad viene marcada por el hecho de la presencia inglesa a finales del siglo XIX. Por estos argumentos Huelva es y será…. “La Puerta del Atlántico”.
Pueblo perteneciente a la Tierra Llana, situado en las cercanías de la capital y a orillas del Río Tinto. Ligada al Descubrimiento, ya que en el Convento de Santa Clara pronunció Colón su juramento, es una población cargada de historia como lo prueban los numerosos monumentos que contiene, como son el Convento de S. Francisco, la Parroquia de Nuestra Señora de la Granada y la Ermita de la Virgen de Montemayor. Aquí nació el Premio Nobel de Literatura Juan Ramón Jiménez, pudiendo visitar su Casa natal y su Museo. A su término pertenece Mazagón, población convertida en centro turístico gracias a sus magníficas playas y a su clima. Cuenta también en su término con los espacios protegidos de la Laguna de El Asperillo, la de Abalorio y la de Las Madres, incluidas en el Paraje Natural de las Lagunas de Palos y Las Madres.
Pueblo perteneciente a la comarca del Condado y situado en pleno corazón de la comarca en fértiles terrenos dedicados a la agricultura de cereales, olivos y viñedos. Los monumentos más interesantes que posee son la Ermita de la Santísima Virgen del Socorro y la Iglesia Parroquial de S. Bartolomé.
Población situada en las proximidades de la capital a orillas del Odiel, convertida en un centro turístico importante gracias aus maravillosas playas de arena fina y dorada. Cuenta con una oferta turística de calidad que atrae todos los años multitud de visitantes. Dentro de su término se encuentran el Paraje Natural de las Marismas del Odiel y el Paraje Natural de los Enebrales de Punta Umbría, dos espacios naturales de gran interés ecológico.
En 1492, los marineros de las villas cercanas a la confluencia del Tinto-Odiel habían acumulado una gran experiencia en la navegación atlántica. Pescadores y comerciantes de la zona llevaban años rivalizando con los portugueses, siguiendo las rutas que los lusitanos abrían en la fachada oceánica africana. La participación y trascendencia de la marinería local en el descubrimiento de América va mucho más allá que la de haber sido meros acompañantes del navegante genovés en su primer viaje. La Rábida, paraje que acoge el monasterio enclavado en el término municipal de Palos de la Frontera, supone el epicentro no solo del primer viaje colombino, sino de toda la empresa del descubrimiento. En este cenobio franciscano Colón halló refugio personal y apoyo para su proyecto revolucionario. Dos monjes, fray Juan Pérez y fray Antonio de Marchena, fueron fundamentales para sus intereses, intercediendo ante la corona y buscando apoyos para el viaje entre los marinos locales. De estos últimos, destaca Martín Alonso Pinzón, rico armador y marinero de gran prestigio en la zona, que desechó los barcos inicialmente confiscados por Colón, financió una parte importante de la empresa y convenció a los mejores marineros para que se enrolasen en el viaje. También es […]
Pueblo minero de origen antiguo pero de construcción moderna ya que la actual población fue levantada por la Compañía Minera a principios de siglo para aprovechar la riqueza que había en el subsuelo de la anterior. Su estructura urbana responde a un modelo racional, cuyo mayor exponente es el barrio de Bellavista, ejemplo de edificación colonial de origen inglés que albergaba al staff de la compañía. En su paisaje, telúrico y misterioso, destacan las explotaciones mineras, hoy abandonadas y usadas para disfrute turístico. Algunas como Corta Atalaya son de una gran espectacularidad. Actualmente cuenta con una iniciativa muy interesante: el Tren Minero, que recorre la ruta que seguía el mineral.
Palma del Río es una ciudad y municipio de la provincia de Córdoba, Andalucía, España. En el año 2016 contaba con 21.241 habitantes. Su extensión superficial es de 200,19 km2 y tiene una densidad de 106,1 hab/km2. Sus coordenadas geográficas son 37º 42′ N, 5º 17′ O. Se encuentra situada a una altitud de 55 metros y a 60 kilómetros de la capital de provincia, Córdoba. Además del núcleo principal del municipio, existen otros dos núcleos urbanos de importancia en el término: El Calonge, que se creó en la década de 1960 por el Instituto Nacional de Colonización, y El Mohíno. Por su localización geográfica, la influencia sevillana es tan importante como la cordobesa. Palma del Río es conocida por dos cosas, por su naranja, y por ser cuna de grandes toreros, entre ellos el Cordobés, el Palmeño, el Barquillero, el Niño de Palma del Río y las Hermanas Palmeño.
Montemayor es un municipio español de la provincia de Córdoba, Andalucía. Emplazada en plena campiña cordobesa. Su situación sobre el monte de mayor elevación del entorno le da a esta villa su nombre propio, así como el sobrenombre de Mirador de la Campiña. Cuenta con un mirador con excelentes vistas situado al pie de su castillo. En el año 2016 contaba con 3.924 habitantes. Su extensión superficial es de 57,98 km² y tiene una densidad de 67,68 hab/km². Sus coordenadas geográficas son 37º 39′ N, 4º 42′ O. Se encuentra situada a una altitud de 413 metros y a 30 kilómetros de la capital de provincia, Córdoba. Su economía se basa en el sector primario, siendo sus principales producciones el cereal, el vino y el aceite.
Sobre el lugar que ocupa La Rambla se asentó un poblado prehistórico en el lugar llamado “La Minilla”, donde hace algunos años se hallaron unos vasos campaniformes con más de 3.000 años. Posteriormente se asentaría una ciudad romana que amurallaría la población y sobre ésta los musulmanes fundarían AL-RAMLA (que significa arenal). En 1480 la tenencia de su castillo fue otorgada a Gonzalo Fernández de Córdoba, “El Gran Capitán“. Pero el 6 de febrero de 1521 La Rambla vivió el acontecimiento histórico más importante durante el reinado de Carlos I, al reunirse en ella las ciudades anticomuneras de Andalucía para ratificar al Rey. La Rambla era villa de realengo perteneciente a la jurisdicción de Córdoba. En 1647Felipe IV le permite nombrar alcalde mayor, pero cinco años más tarde la entrega al Conde Duque de Olivares, cuyo heredero, el marqués de El Carpio, la vende en 1677 a los marqueses de Almodóvar, más tarde señores de La Rambla. En La Rambla, Córdoba, 4 de marzo de 1864, nació Alejandro Lerroux, que ocupó la presidencia del gobierno durante un breve período de la Segunda República Española.
Montilla con un escenario excepcional de tierras albarizas, delimitado por su especial orografía, por su singular climatología y por su excepcionalidad geológica. El milagro se repite cada año. En el mes de septiembre, Montilla se viste de gala para celebrar el ancestral rito de la vendimia. Las altas temperaturas que se registran en la Campiña durante los meses de verano permiten alcanzar a las uvas su grado óptimo de maduración. Pero sin duda la visita a la ciudad del vino consistirá en conocer de cerca su paisaje, forma de vida, el cuidado del cultivo, degustar el vino de las tinajas o aprender de nuestros vinos generosos en sus bodegas. Deleitar los sentidos con el maridaje del vino en nuestra gastronomía y compartir la simpatía y encuentro en las típicas tabernas y en los centros del vino dedicados a mostrar lo mejor de nosotros mismos.